Querido Lartaun:
Leer tu artículo me ha emocionado. Por lo que dices, pudiera que uno sea mayor que tú, no mucho más. También mi primera gran referencia es la que citas al principio, aquel 77, que nos hizo sentir muy orgullosos pero que nos dejó un sabor amargo. Después vendría todo lo demás, entre otras cosas, la final que comentas, el llanto de Toquero, la decepción desconsolable, ante la que parecía, en su momento, que el mundo se nos acababa, que nunca más volveríamos a sentir ese cosquilleo tan agradable de ver a nuestro Athletic campeón. Pero mira por donde, este verano, cuando menos lo esperábamos, fuimos y nos hicimos con un título…., de acuerdo, menor, pero nos supo a gloria: Toquero, que ya se había ido al Alavés, pero que jamás se irá de nuestros corazones, debió llorar esa noche como tantos otros lo hicimos, de una alegría infinita, de un resarcimiento que la Historia no ha querido que tardase en llegar. AUPA ATHLETIC.
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